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jueves, 31 de marzo de 2011

EEUU detecta la presencia Al Qaeda entre rebeldes libios


 LONDRES Los servicios de Inteligencia de EEUU han percibido "destellos" de una "potencial" presencia de Al Qaeda entre las tropas que luchan contra el líder Muamar El Gadafi, aunque no son "significativos", dijo hoy un alto oficial militar.

El almirante James Stavridis, comandante de las tropas de EE.UU desplegadas en coordinación con la OTAN en Europa, hizo estas declaraciones durante una comparecencia ante el Senado de Estados Unidos.

"Hemos visto destellos de potencial presencia de Al Qaeda y Hezbollah, hemos visto diferentes cosas. Pero, en este momento, no tengo el suficiente detalle para decir que existe presencia significativa de Al Qaeda o de otros grupos terroristas entre las fuerzas insurgentes", precisó.

Stavridis ratificó ante lo senadores de EEUU el compromiso con las fuerzas insurgentes de la coalición internacional.

"La inteligencia que estoy recibiendo en este momento me hace pensar que el liderazgo que estoy viendo está formado por hombres y mujeres responsables que están luchando contra las fuerzas del coronel Gadafi", subrayó.

Los secretarios de Defensa, Robert Gates, y la secretaria de Estados, Hillary Clinton, tienen previsto comparecer mañana ante el Senado en una sesión a puerta cerrada para responder a las preguntas de los senadores sobre Libia.

El presidente de EE.UU, Barack Obama, se dirigió el lunes a la nación en un discurso en el que explicó las razones de la intervención militar que ha permitido salvar "numerosas vidas" y señaló que transferirá la responsabilidad de las operaciones militares aliadas en Libia a la OTAN mañana miércoles.

Fuerzas especiales e inteligencia, claves en el conflicto libio









La presencia de agentes de inteligencia y de miembros de fuerzas especiales occidentales entre los insurgentes libios, previsible según los expertos aunque desmentida oficialmente, es una de las claves del conflicto.
Oficialmente, la coalición no cuenta con hombres sobre el terreno en Libia. Pero a finales de febrero, la prensa inglesa ya hablaba de la intervención de hombres del SAS --las fuerzas especiales del ejército británico-- para sacar a cientos de empleados de grandes compañías petroleras aislados en el desierto.
Desde entonces, la coalición desmiente toda implicación de agentes occidentales entre los insurgentes libios. En la Dirección General de la Seguridad Exterior (DGSE), los servicios de inteligencia franceses, se limitan a repetir la fórmula habitual: "No comentamos nuestras operaciones reales o supuestas".
Sin embargo, para los especialistas del espionaje, la presencia en tierra de agentes en este tipo de conflictos es "una constante en la historia militar".
"Dado el carácter sulfuroso de esta intervención y las críticas del mundo árabe, es muy complicado desplegar las llamadas fuerzas convencionales", destaca Pascal Le Pautremat, especialista del mundo árabe y colaborador de la revista "Défense" del Instituto de Altos Estudios de Defensa Nacional (IHEDN), con sede en París.
"Es más sensato hacer intervenir a equipos pequeños, muy discretos, que aporten su habilidad operativa en materia de instrucción, encuadramiento y orientación puramente táctica", añade.
Esos equipos tendrían entre "cinco y doce personas" y contarían con potentes sistemas de transmisión. Su objetivo sería "determinar objetivos" para permitir a los aviones de la coalición afinar sus ataques. Esos agentes infiltrados operarían de noche para calibrar el potencial de hombres y blindados de las fuerzas de Muamar Gadafi, y para aconsejar a los insurgentes o enseñarlos a manejar armas antitanques.
Dicha presencia en tierra es especialmente necesaria si se tiene en cuenta que la coalición quiere evitar pérdidas civiles.
"Cuantos más hombres haya en el terreno, menos riesgo hay de equivocarse", comenta Pascal Le Pautremat.
Desde el inicio de los ataques en Libia el 19 de marzo, la coalición no ha dado parte de ningún incidente grave en el que hubiera civiles implicados, al contrario de lo ocurrido en la campaña de Afganistán, donde las víctimas civiles se cuentan por centenares a menudo por falta de información.
La pregunta que se plantea es que haya espías desplegados en Bengasi, el bastión de la oposición a Gadafi en el este del país.
"En este tipo de situaciones, es de prever que todo servicio de inteligencia digno de ese nombre esté posicionado en Bengasi para ver lo que pasa allí", confía un especialista de inteligencia, que prefiere el anonimato.
Según él se trataría de agentes y militares de países de la coalición, como Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos, y también de Alemania, Rusia e Israel, dotados de servicios de inteligencia muy fuertes.
"De todos modos", recuerda Pascal Le Pautremat, "hay elementos posicionados desde hace años en la región, en África occidental y central, y en la zona del Magreb, donde se libra la batalla contra AQMI (Al Qaida en el Magreb Islámico)".

Musa Kusa, de fiel servidor de Muamar Gadafi a desertor



TRÍPOLI — Musa Kusa, ministro de Relaciones Exteriores libio y fiel servidor de Muamar Gadafi, que anunció que renunciaba al cargo el miércoles al llegar a Londres, estuvo vinculado en los últimos años a todas las tratativas que permitieron que Libia volviera a ser frecuentable para Occidente.
En su condición de jefe del servicios de inteligencia de 1994 a 2009, Kusa, de 59 años, era un hombre fuerte de los comités revolucionarios, columna vertebral del régimen libio y hombre de confianza de Gadafi.
Kusa tuvo a su cargo importantes expedientes, como los vínculos de Libia con distintos países africanos y sus relaciones con Occidente.
Fue un negociador clave en el caso de las enfermeras búlgaras, que fueron liberadas en julio de 2007, así como en el desmantelamiento, en 2003, del programa nuclear libio, lo que abrió la vía al levantamiento del embargo comercial decretado por Estados Unidos en 1986.
Aunque sobre todo se dio a conocer por su papel en la indemnización de las familias de las víctimas de los atentados de Lockerbie (1988, 270 muertos) y del DC-10 de UTA (1989, 170 muertos), lo que levantó los últimos obstáculos para la normalización de las relaciones de Trípoli con Occidente.
Tras haber encarnado durante dos décadas el lado oscuro del régimen del coronel Gadafi, este tripolitano encarnaba en los últimos años la apertura.
Surgido de una familia modesta, becario y titular de una licencia de la universidad estadounidense de Michigan (1978), empezó su carrera en los servicios especiales como responsable de seguridad de las embajadas libias en Europa del Norte.
Kusa fue nombrado embajador de Libia en el Reino Unido en 1980, pero fue expulsado el mismo año por los británicos al declarar su determinación de liquidar a los "enemigos de la revolución" en suelo británico.
En 1984 se integra a Mathaba, una fundación encargada de coordinar los movimientos de liberación a través del mundo, en particular en África y América Latina.
Kusa fue viceministro de Relaciones Exteriores de 1992 a 1994, cuando asumió la jefatura del servicio de inteligencia, puesto que ocupó hasta 2009, cuando asume la cartera de Relaciones Exteriores en reemplazo de Abdulrahman Shalgham, nombrado embajador de Libia ante la ONU, quien también desertó hace unas semanas.

La CIA ya está en Libia para ayudar a los rebeldes

Obama autoriza la ayuda encubierta a la oposición contra Gadafi. Los servicios de inteligencia británicos también están en suelo libio




Varios funcionarios de la CIA se han desplegado a Libia para contactar con los rebeldes y guiar a los ataques de la coalición, según recoge el diario New York Times. El presidente Barack Obama había dado permiso para ayudar a secreto rebeldes. Sin responder directamente a esta información, la Casa Blanca reiteró que aún no se ha decidido proporcionar armas a la oposición la lucha contra las fuerzas del coronel Gaddafi.
Los agentes de la CIA, según The New York Times, han estado presentes durante varias semanas sobre el terreno en Libia, con la misión de establecer vínculos con los rebeldes y para identificar objetivos de las operaciones militares.
La misma fuente consultada por el diario neoyorquino asegura que "decenas de miembros de las fuerzas especiales británicas y agentes del servicio de inteligencia MI6 trabajan en Libia", en particular, para recoger información sobre las posiciones de las fuerzas leales.
La cadena de televisión ABC, por su parte, ha desvelado que Obama había firmado un memorando secreto que da luz verde a las operaciones encubiertas para "contribuir al esfuerzo" en Libia. La televisión ABC destacó, no obstante, que esta autorización no permite armar a los rebeldes de inmediato, pero no excluye la posibilidad de hacerlo en el futuro.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, rechazó "hacer comentarios sobre asuntos de inteligencia". "Repito lo que dijo el presidente ayer (martes): No se ha tomado una decisión sobre el suministro de armas a la oposición o de cualquier grupo en Libia. Nosotros no lo excluimos, pero no se ha decidido. Examinamos todas las posibilidades para ayudar a los libios ", aseguró en un comunicado.


martes, 29 de marzo de 2011

El CNI, al servicio de la Casa Real: de Letizia Ortiz a Bárbara Rey


Ni Don Juan Carlos, Letizia Ortiz o Sabino Fernández Campo han podido escapar a los duros exámenes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), anteriormente llamado CESID: todos ellos y muchos más, ya sean reyes, príncipes o presidentes del Gobierno, han sido investigados por un organismo que, aunque depende de la Moncloa, mantiene desde sus comienzos una fluida relación con el palacio de La Zarzuela. 
Pero, a su vez, la Casa Real también se ha servido de los servicios del CNI para investigar el pasado y el presente de numerosos personajes. Un posible caso es el de Letizia Ortiz. Para muchos, la probable existencia de un informe secreto que aportara luz sobre el pasado de la futura reina de España es tan sólo un rumor que ha contribuido a alimentar la leyenda urbana; para otros, como Fernando Rueda, el especialista en temas de espionaje que acaba de publicar Las alcantarillas del Poder, un compendio de las cien operaciones de los servicios secretos que marcaron los últimos 35 años de historia de España, es una realidad: existió, aunque no hay rastro de él.
“En los meses en los que salieron juntos y acrecentaron su amor, Letizia tuvo que pasar, sin saberlo, la prueba más dura antes de casarse con el heredero a la Corona: la investigación del CNI”, cuenta Rueda en su libro. Al parecer, este tipo de pesquisas, que no puede ejecutar nadie más, son habituales cuando se producen nuevos ingresos en la Familia Real con el fin de evitar vulnerabilidades o ataques futuros por parte de grupos de presión o de los medios de comunicación. De existir tales se solucionan en secreto para que no terminen convirtiéndose en un “obstáculo”.
“Zarzuela sabía que la misma investigación sería llevada a cabo por los enemigos de España y por tanto había que evitar a toda costa cualquier tema que pudiera servir de campo de batalla. No se espió formalmente a Letizia, sino que se investigó su vida previa a su relación con el Príncipe para evitar que servicios de espionaje extranjeros o mafias pudieran chantajear al país o encontrar alguna debilidad. Posiblemente, se procedería a retirar por ejemplo los informes médicos para que la CIA o la KGB no se hicieran con la información”, afirma Rueda a Vanitatis.
El autor, que tiene la certeza de que el informe existió, aunque posiblemente estuviera basado en conversaciones verbales relatadas por “personas de la más absoluta lealtad a la Casa”, cuenta que en este tipo de casos, como quizá ocurriera también con Iñaki Urdangarin o Jaime de Marichalar, suele ser el Rey quien encarga el informe y que “el resultado es entregado en mano al director del CNI, que ni siquiera ha informado a sus más íntimos colaboradores de la investigación que ha puesto en marcha”.
Isidre Cunill ya especulaba en su libro Letizia Ortiz: una republicana en la corte de Juan Carlos I, con el contenido de dicho informe en el que aparecería, según él, una presunta detención por posesión de hachís y un supuesto aborto que la princesa Letizia habría sufrido en un hospital de México. A este respecto, Rueda duda que Cunill haya tenido acceso a ese documento como algo material, "si no lo hubiera mostrado sin reparos en el libro, como hubiese hecho cualquiera”.
Las conversaciones privadas del Rey
De lo que no cabe duda es de la vigilancia a la que fue sometido Sabino Fernández Campo, secretario de la Casa del Rey entre 1977 y 1990. Los espías fueron sorprendidos en febrero de 1982 y pasaron a la historia como los primeros en ser pillados in fraganti. No fue la única ocasión en que el CNI fue descubierto con las manos en la masa. El caso que mayor conmoción causó fue el del 12 de junio de 1985. El Mundo llevaba a su portada la siguiente noticia: El Cesid grabó y archivó en su ‘cintateca’ conversaciones del Rey y sus amigosSe destaparon una serie de conversaciones interceptadas por el Gabinete de Escuchas del Jefe del Estado con amigos como el príncipe Tchokotua, el embajador Prado y Colón de Carvajal y el argentino Carlos Perdomo. Aquello terminó con la dimisión del director del CESID, Emilio Alonso Manglano, el ministro de Defensa, Julián García Vargas, y el vicepresidente del gobierno, Narcís Serra.
Pero, el capítulo quizá más curioso del libro Las Alcantarillas del Poder es en el que se narra una presunta intervención por parte del Cesid en casa de Bárbara Rey con el fin de sustraer un material “escabroso”, referido a una alta personalidad del país, a quien muchos pusieron nombre y cargo: Don Juan Carlos, Rey de España. El escándalo estaba servido y las informaciones no dejaron de sucederse. Incluso hoy en día el acontecimiento se ha colado en la lista de las cien operaciones de los servicios secretos españoles que han marcado el devenir de los últimos 35 años de historia del país.

lunes, 28 de marzo de 2011

El CNI blindó los teléfonos de Antonio Camacho tras ser espiado por sus propios policías


El CNI blindó los teléfonos de Antonio Camacho tras ser espiado por sus propios policías

PARA EVITAR QUE SUS LLAMADAS FUERAN 'PINCHADAS' COMO OCURRIÓ EN EL 'CASO FAISÁN'


Madrid.- Le pilló de improviso y se sintió vigilado, seguido..., espiado. El secretario de Estado para la SeguridadAntonio Camacho, no sabía que su teléfono había estado en el punto de mira de sus propios subordinados, de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que trabajan en la Comisaría General de Información.
Como les pasa últimamente a todos los políticos españoles, se enteró por los medios de comunicación, conoció por la prensa que en los informes de la Policía aportados a Garzón en el caso del presunto chivatazo al dueño del bar Faisán aparecía su número de teléfono móvil.
Garzón lo sabía, conocía desde el minuto uno que entre los miles de números que llegaron a su juzgado, también estaba el del responsable de la Policía y la Guardia Civil. Pero no le dijo nada. No le comentó nada de nada en los frecuentes contactos privados que ambos mantuvieron, mientras Garzón manejaba la dirección del sumario del chivatazo. Los policías sólo incluían el número, pero no la identidad. Tampoco figuraba ningún tipo de relación extraña en aquellas fechas entre ese número móvil y los de los implicados, pero Camacho se sintió indignado con la actuación de los suyos, que en más de una ocasión calificó de desleal. Hay quien sostiene que, incluso, se llegó a plantear dimitir, pero optó por esperar para comprobar cómo evolucionaba la investigación del caso.
Lo que sí se produjo acto seguido (era principios del año 2009) fue una intervención de los especialistas telefónicos del Centro Nacional de Inteligencia. ¿Cuál era su intención? Blindar aún más si se podía las telecomunicaciones del responsable de seguridad del Estado. Los agentes dispusieron dispositivos más modernos que evitan, incluso, que las llamadas de Camacho puedan ser detectadas aunque el espía esté a menos de 50 metros y con el polémico maletín. Ese maletín con tecnología de última generación que permite conocer las conversaciones en tiempo real de una persona, sea cual sea el número desde el que habla siempre y cuando esté en un radio cercano de un par de kilómetros.
En aquellas fechas, la sensación que se instaló en Interior en el CNI es que el número dos del ministerio había sido espiado. Y que esos espías podían, incluso, pertenecer a las Fuerzas de Seguridad del Estado. Finalmente fue la llegada del juez Ruz al juzgado la que puso en evidencia que los contactos de Camacho con los imputados por el 'caso del Faisán' tenían algo más de recorrido y ordenó que se investigaran sus movimientos telefónicos. Finalmente, atendiendo a los informes policiales, el instructor declinó tomar testimonio a Camacho, de momento.

lunes, 21 de marzo de 2011

El CNI niega haber espiado al exlehendakari Ibarretxe

El CNI niega haber espiado al exlehendakari Ibarretxe


El director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, negó ayer en el Congreso que su departamento hubiese espiado al exlehendakari Juan José Ibarretxe o a otros políticos de su gobierno o del PNV. Sanz Roldán aclaró en la comisión de secretos oficiales, celebrada a puerta cerrada, que el CNI nunca ha espiado ni a Ibarretxe ni a ningún otro político de ningún partido y menos a un gobierno autonómico, actuación que recordó, además, sería ilegal.

Sanz Roldán aclarará al Congreso el supuesto espionaje del CNI a Ibarretxe

El director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, comparece hoy en la Comisión de fondos reservados del Congreso para aclarar el supuesto espionaje de este organismo al PNV y al ex lehendakari Juan José Ibarretxe.Sanz también dará explicaciones, a petición de IU, sobre las operaciones de los servicios de inteligencia españoles en las zonas de Afganistán en las que están presentes las Fuerzas Armadas, según han confirmado fuentes parlamentarias.El pasado 21 de enero, el diario Deia informó de que un testigo de la presunta trama de espionaje de agentes de la Ertzaintza a dirigentes del PP de Álava declaró ante el juez que investiga el caso haber espiado a Ibarretxe y al PNV para el Centro Nacional de Inteligencia (CNI).

viernes, 18 de marzo de 2011

«Tarta» fue candidato del PP y espió luego a Innovación Democrática

«Tarta» fue candidato del PP y espió luego a Innovación Democrática





Jesús María Fernández Benito, «Tarta» -el ex alto cargo del Departamento de Interior que espió al lehendakari Juan José Ibarretxe para el CNI-, también pasó a la Ertzaintza información sobre Innovación Democrática, un partido del tipo UPyD, que en Araba estaba formado por ex miembros de UA y del Foro Ermua y del que fue candidato en 2007. Cuatro años antes, fue en la lista municipal del PP de Bergara y ofreció datos sobre plataformas de la izquierda abertzale.

Jesús María Fernández Benito -conocido como Tarta, Txusma y Jeje- ha alcanzado relevancia mediática después de haberse jubilado y marchado de Euskal Herria. Mañana, el director general del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, deberá responder en la comisión de secretos del Congreso de los Diputados a las preguntas del PNV sobre el alcance de su espionaje al lehendakari Juan José Ibarretxe.
Datos sobre Fernández Benito aparecían en las fichas intervenidas al ex dirigente del ABB Aitor Telleria. Y, cuando fue llamado a declarar por el juez en calidad de perjudicado, se explayó sobre sus actividades. Luego lo ha hecho también ofreciendo entrevistas o enviando escritos a medios como «El Mundo» y «El País», ocultando su identidad real. Por un lado, señaló que se aprovechó de su puesto en Lehendakaritza, donde «no hacía nada», para «vigilar un poquito a Ibarretxe y compañía». Por otro, acusó al EBB, y en concreto al fallecido Gorka Agirre, de dirigir la Ertzaintza por encima de Juan María Atutxa y Javier Balza.
Tarta, nacido en Bilbo, dice haber sido militar y haber colaborado con los servicios secretos del franquismo desde 1963. Cuando iba a crearse la Ertzaintza, trabajaba en el Gobierno Civil como experto en transmisiones y Luis María Retolaza le llamó en 1981 para participar en la puesta en marcha de la nueva Policía. Según relató al juez, pasó a ser un hombre de confianza del consejero y también de Genaro García Andoain. Oficialmente, fue jefe de operaciones de Protección Civil, pero asegura que Retolaza le dijo que «aunque estés adscrito a otra unidad, tú dependes de mí».
Sus relaciones con la Guardia Civil y los servicios secretos españoles eran conocidas y cuando Juan María Atutxa llegó al Departamento de Interior, en 1991, lo mandó al Servicio de Meteorología; de allí lo trasladaron a Presidencia, a un puesto que definió ante el juez como «vacío de contenido», pero que le sirvió, según contó, para transmitir al CNI datos sobre el lehendakari, el PNV y el Gobierno de Lakua.
Relacionado con el PP
Las nuevas ocupaciones profesionales las combinó Jesús María Fernández Benito con algunas incursiones en la actividad política y el ejercicio de tareas de enlace entre la Unidad de Información de la Ertzaintza y los servicios secretos españoles.
En el ámbito político, Fernández Benito ha reconocido su relación con el PP. Precisamente, fue el director gerente de este partido en Gasteiz quien le puso en contacto con su último enlace en la Ertzaintza.
Pero, además, el nombre de Jesús María Fernández Benito aparece también como el número dos de la candidatura del PP al Ayuntamiento de Bergara en las elecciones municipales de 2003.
Sin embargo, no fue ésta su única incursión en el terreno electoral. Cuatro años más tarde figura como número dos de Innovación Democrática a las Juntas Generales de Araba, por la circunscripción de Gasteiz. Innovación Democrática fue un partido que en la CAV estuvo constituido por algunas personas procedentes de Unidad Alavesa y sectores del ámbito del Foro Ermua y similares. Uno de sus coordinadores en la CAV fue Ernesto Ladrón de Guevara, que definió la nueva formación como «una alternativa al actual modelo de partido» para «corregir los vicios de los oligopolios dentro de las formaciones, para primar más a los ciudadanos y menos a las estructuras políticas».
La candidatura a las Juntas Generales en la que participaba Tarta no pudo concurrir finalmente a aquellos comicios, ya que incumplía el criterio de paridad establecido por la normativa electoral.
Lo que no queda claro es si Tarta se acercó a Innovación Democrática por convicciones políticas o por razones «profesionales». O quizá fuera una combinación de ambas cosas porque, según los documentos judiciales que obran en poder de este diario, «CK95» o «5099», que son las claves de informante de Jesús María Fernández Benito en la Unidad de Información y Análisis de la Ertzaintza, dio cuenta a su enlace policial al menos en dos ocasiones sobre Innovación Democrática .
La primera vez fue el 13 de abril de 2007 y hablaron sobre «listas electorales de INNDE». En la segunda ocasión, el 28 de mayo, pasadas ya las elecciones, el asunto del contacto fue «fracaso de INNDE». Esta formación apenas obtuvo votos. Lo que cualquiera puede preguntarse es por qué la Ertzaintza reunía información sobre un partido legal y «de orden».
Candidaturas independentistas
Las elecciones municipales de 2003, en las que Jesús María Fernández Benito se presentó en la lista del PP en Bergara, fueron las primeras que la izquierda abertzale tuvo que afrontar ilegalizada. Y Tarta fue una de las fuentes que informó a la Ertzaintza, que entonces dirigía Javier Balza, sobre los pasos que preveía dar esta opción política.
En la reunión mantenida el 8 de abril de 2003 en el «casco viejo de Gasteiz», Fernández Benito informó a su enlace de que «Batasuna va a crear una serie de plataformas que se van a presentar a las elecciones municipales de mayo de 2003 como candidaturas independientes». Y le dio los nombres de algunas de estas candidaturas en el territorio de Araba. La Ertzaintza consideró esos datos como información que «parece fiable».
Los encuentros de Tarta con su enlace en la Unidad de Información y Análisis documentados en los informes entregados por la Ertzaintza al Juzgado van desde abril de 2003 hasta el 20 de febrero de 2009. En este último el asunto abordado fue la obtención de «información sobre el asesor del delegado del Gobierno».
en el congreso
El director general del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, informará mañana en la comisión de secretos del Congreso sobre el supuesto espionaje de Jesús María Fernández Benito al lehendakari Juan José Ibarretxe y al PNV.
El PNV no consiguió que compareciera en Gasteiz
El PNV propuso que Jesús María Fernández Benito fuera llamado a declarar ante la comisión del Parlamento de Gasteiz que investiga el supuesto espionaje a diversas personalidades alavesas, entre las que figura como afectado el propio Tarta. El PSE y el PP se opusieron y no fue incluido en la lista. Cuando trascendieron las intenciones jeltzales, el ex cargo de Interior remitió un escrito a «El País» en el que advertía al PNV de que guarda «información sensible» sobre actuaciones que les afectan «muy negativamente» y que «les tienen que preocupar en gran medida». Les indicaba que, «si fueran inteligentes, evitarían a toda costa mi comparecencia». GARA
Contó a la Ertzaintza que el Gobierno supo el 11-M que no había sido ETA
Jesús María Fernández Benito le contó a su enlace de la Ertzaintza que el CNI seguía desde el mediodía del 11 de marzo de 2004 la pista de la yihad islámica como autora de las explosiones en los trenes y que para las 8 de la tarde el Gobierno español ya sabía que no había sido ETA, aunque trataba de relacionarla «por todos los medios» con los atentados hasta que pasaran las elecciones generales porque, de lo contrario, «todos se iban a ir al paro».
Según consta en la documentación de los archivos de la Ertzaintza en poder del Juzgado de Instrucción número 4 de Gasteiz, un agente de la Unidad de Investigación y Análisis se reunió con Fernández Benito para obtener información sobre las repercusiones de los atentados registrados en Madrid. Tarta le contó que, tras las explosiones, «personas relacionadas con el CNI en Gasteiz fueron movilizadas para que buscaran informaciones que relacionaran a ETA con Al Qaeda». Según dijo, «estas personas sabían desde el mediodía que había un coche con explosivos y algún documento árabe».
Fernández Benito añadió que, «según transcurría el día, empezaron a buscar una página web de origen italiano que podía comentar las relaciones de ETA con organizaciones árabes».
Por la información ofrecida por el ex alto cargo de Interior y colaborador de los servicios secretos españoles se tiene constancia de que el Gobierno español trataba desesperadamente de involucrar a ETA en los atentados, a pesar de saber que no era la autora de los mismos.
Según le relató Tarta al agente de la Ertzaintza, «sobre las 20.00 horas aproximadamente una de estas personas de Gasteiz habló varias veces con el periodista de Madrid de apodo Zulo. Este periodista le indicó que el Gobierno de Madrid está bastante jodido porque sabían que no había sido ETA y sí Al Qaeda. Que había que intentar por todos los medios relacionar a ETA con los árabes hasta después de las elecciones y que, si esto no se conseguía, todos se iban al paro».
El informe de la Ertzaintza añade que «al periodista de apodo Zulo, muy conectado con la Guardia Civil y el CNI, le indicaron que no sacarían ningún artículo sobre Al Qaeda y sí sobre la relación de ETA con los árabes. Que había que crear confusión hasta después de las elecciones, ya que había mucho en juego».
El propio informe de la Ertzaintza identifica al periodista Zulo como José María Zuloaga, redactor de «La Razón». Llamativamente, aproximadamente un año después, a partir del 2 de junio de 2006, Zuloaga pasa a figurar como una fuente notable de la Unidad de Información y Análisis de la Policía autonómica.
Los contactos entre el enlace policial y el periodista son prácticamente semanales. Zuloaga ofrece a la Ertzaintza datos que la Guardia Civil maneja sobre ETA y en un ocasión pide que le traduzcan un «Zutabe» al español. I.I.









sábado, 12 de marzo de 2011

los servicios de inteligencia del Reino Unido no parecen dignos herederos de 007


Puede que en el mundo de la ficción James Bond sea el más glamoroso y efectivo de los espías, pero en la vida real los servicios de inteligencia del Reino Unido no parecen dignos herederos de 007.
En el último de una serie de episodios que han avergonzado a la diplomacia británica, un equipo especial enviado a Libia para establecer contactos preliminares con los rebeldes que combaten al coronel Muamar Gadafi fue capturado… por los guardias de seguridad de una granja.
La avanzada, descrita como “un pequeño equipo diplomático” por el ministro de Relaciones Exteriores, William Hague, estaba integrada por dos agentes del servicio de secreto de inteligencia (MI6) y seis soldados de las tropas especiales británicas (SAS).
“Ellos experimentaron algunas dificultades que ya fueron resueltas satisfactoriamente. Ya salieron de Libia”, admitió Hague, quien este lunes se dirigirá al Parlamento para explicar el caso.
Por “dificultades” entiéndase su captura en una granja de trigo ubicada en las afueras de Bengasi, en el oriente libio, y varios días de interrogatorios a manos de los rebeldes, quienes sospechaban que podía tratarse de mercenarios contratados por Gadafi.
Para muchos analistas, el episodio también es un buen ejemplo del afán de protagonismo del Reino Unido en el mundo árabe, así como de sus problemas para influir decisivamente sobre los acontecimientos en la región.
Error tras error
Los problemas de Londres en Libia se iniciaron con la accidentada operación de evacuación de los ciudadanos británicos, que fue duramente criticada.
La diplomacia del Reino Unido tampoco se cubrió de gloria cuando el ministro Hague anunció, equivocadamente, que Gadafi había huido del país rumbo a Venezuela.

“William Hague”
Luego, el primer ministro David Cameron anunció que estaba estudiando la posibilidad de imponer una zona de exclusión aérea sobre Libia, pero la posibilidad fue rápidamente desestimada por Estados Unidos y sus aliados.

Y una propuesta británica de apoyar con armas a los grupos opositores a Gadafi se tuvo que transformar rápidamente en una oferta de asesoramiento, luego de que los rebeldes dijeran públicamente que no querían ser vistos como instrumento de intereses extranjeros.
“Me alegra que este episodio en particular haya terminado como una farsa y no como una tragedia”, le dijo a la BBC el ex embajador británico en Libia, Oliver Miles, refiriéndose a la captura de los “enviados” británicos.
La operación fue descrita como “aparentemente incompetente” por el especialista en asuntos de seguridad de la BBC, Frank Gardner.
“No había necesidad de hacer las cosas como si se tratara de una película de capa y espada”, explicó Gardner.
Algo similar dijo Essam Gheriani, uno de los miembros del comité coordinador que los rebeldes han instalado en la ciudad de Bengasi.
“Llegar en medio de la noche con un equipo de espionaje, varias armas y pasaportes… Ésa no es la forma de establece contacto”, afirmó Gheriani en declaraciones recogidas por el diario británico The Guardian.
Nuevos esfuerzos
A pesar de los traspiés, el gobierno del Reino Unido insistió en que seguirá intentando establecer contacto con los rebeldes libios.
“Nuestra intención es, luego de consultar con la oposición, enviar otro equipo para fortalecer el diálogo a su debido tiempo”, dijo Hague.
Y el ex embajador Oliver Miles hizo notar que el Reino Unido no ha sido el único país en ser avergonzado militarmente en Libia, en lo que va del conflicto.
Efectivamente, el gobierno de Holanda está negociando la liberación de tres de sus infantes marina capturados por tropas leales a Gadafi.
Según las autoridades holandesas, los militares estaban ayudando en las labores de evacuación cuando su helicóptero fue interceptado.



Servicios de inteligencia de EE.UU. creen que los rebeldes no derrotarán a Gaddafi


"A largo plazo el régimen prevalecerá", comentó el director del organismo, aludiendo a los inmensos arsenales de 

armas del líder libio.





El director de losservicios de inteligencia de Estados Unidos,James Clapper, señaló hoy que no cree que el líder libio Muammar Gaddafi pueda ser derrotado fácilmente por los rebeldes.

El régimen de Gaddafi tiene mejores armas que los insurgentes, señaló Clapper en una comparecencia ante el Congreso norteamericano. "Creemos que el régimen de Gaddafi prevalecerá a largo plazo", agregó.

El jefe de la inteligencia estadounidense también habló de una posible parálisis en el conflicto, donde el bastión rebelde de Bengasi se convierta en una especie de "mini- Estado".

Clapper fundamentó su estimación apuntando a los inmensos arsenales de armas en poder de Gaddafi, equipos entre los que se encuentran misiles antiaéreos y sistemas de radares.

La defensa antiaérea es la segunda más grande de la región detrás de la de Egipto, señaló. No obstante, indicó que el desarrollo de la situación en Libia cambia continuamente por lo que es "difícil dar estimaciones".

El jefe de la agencia de inteligencia del Pentágono, el teniente general Ronald L. Burgess, aseguró que el momento es favorable a Gaddafi, aunque no se aventuró a asegurar que fuera a ganarle la batalla a los rebeldes.

El presidente estadounidense Barack Obama llamó a Gaddafi a dejar el poder, mientras que su administración está explorando vías para aumentar la presión en un momento en que toda la comunidad internacional está tratando de hallar una solución al conflicto.

Estados Unidos ha congelado más de US$ 30 mil millones en activos pertenecientes al gobierno de Gaddafi. También la Unión Europea ha impuesto sanciones al líder libio.

La Casa Real, Moncloa, ministerios y embajadas reciben a diario ataques informáticos. El CNI vigila sus terminales y ha puesto en marcha sistemas de protección

El ataque informático registrado este fin de semana en el Ministerio de Hacienda francés no ha cogido por sorpresa al CNI. En España, los ordenadores de la Casa Real, Moncloa, ministerios o embajadas sufre casi a diario esto tipo de ‘invasiones’. Pero el CNI les protege.



El ataque informático que ha sufrido el ministerio de Hacienda francés el pasado fin de semana ha sido considerado por las fuerzas de seguridad galas como uno de los peores de la historia del país. El objetivo de los piratas era obtener expedientes con información sensible sobre la presidencia francesa del G-20.
En España, las fuerzas de seguridad y los servicios de inteligencia detectan habitualmente inicios de ataque contra ordenadores de las administraciones públicas. Según fuentes del CNI, consultadas por El Confidencial Digital, los ordenadores de altos cargos del Estado son atacados “prácticamente a diario” por piratas informáticos.
Las fuentes consultadas aseguran que el objetivo primordial que buscan los atacantes es la sustracción de información sensible, reservada y confidencial que se encuentra en los discos duros y servidores de correo electrónico de, entre otros, la Casa Real,Moncloaministerios, secretarías de Estado y embajadas.
El procedimiento que utilizan los hackers consiste en el envío de un correo electrónico a una dirección previamente seleccionada. Normalmente, dirigido a altos funcionarios del Estado, cuyas direcciones de email pueden encontrarse con relativa facilidad en la red.
Ese correo electrónico lleva adjunto un archivo infectado con un troyano, un virus que permite a quien lo envía tener acceso al disco duro de quien recibe el ataque. Según las fuentes consultadas por ECD, si el archivo es lo suficientemente sofisticado “pasará el filtro del antivirus”.
A partir de ese momento, todas las comunicaciones que entren o salgan del ordenador infectado quedarán registradas en el ordenador del pirata informático. Dicho de otra forma, el atacante dispondrá de un completo registro de lo que hace y dice el usuario del ordenador infectado.
Para evitar que esto ocurra en terminales y equipos que suelen manejar información sensible y reservada queden expuestos a ataques, el Centro Criptológico Nacional –dependiente del Centro Nacional de Inteligencia- lleva años poniendo en marcha un sistema que evita intrusos indeseados en las comunicaciones entre altos cargos del Estado.
Según las fuentes consultadas por ECD, por el CCN pasan los ordenadores y móviles –que actúen como receptores de email- que actualmente utilizan todos los altos cargos del Estado, desde el rey hasta un secretario de Estado.
Los expertos del centro trabajan diariamente diseñando programas informáticos y dispositivos capaces de encriptar estas comunicaciones, haciendo que cualquier fuga de información sea indescifrable para un pirata informático.

viernes, 11 de marzo de 2011

El director general del CNI responderá el 15 de marzo en el Congreso sobre el supuesto espionaje al PNV y a Ibarretxe





El director general del Centro Nacional de Inteligencia (CNI),  Félix Sanz Roldán, responderá el próximo martes, 15 de marzo, en la comisión de control de los créditos destinados a gastos reservados del Congreso de los Diputados, sobre el supuesto "espionaje" al que se habría sometido al PNV y al anterior lehendakari, el nacionalista Juan José Ibarretxe, según informaron a Europa Press fuentes parlamentarias.
   El portavoz del PNV en la Cámara baja, Josu Erkoreka, registró el pasado mes de enero una solicitud para que compareciera el director general del CNI con el fin de que aclarara "la vigilancia ejercida sobre el PNV, en general, y el lehendakari Ibarretxe, en particular", según el testimonio de un ex funcionario del Departamento de Interior del Gobierno vasco ante el Juzgado de Instrucción número 4 de Vitoria, que investiga el presunto caso de corrupción y espionaje político en Álava.
   Erkoreka considera "de extrema gravedad" el contenido de la declaración ante la autoridad judicial de uno de los testigos, conocido como "El Tarta", en la que aseguraba que se habría suministrado al CNI información diversa sobre el PNV y, en especial, sobre la actividad "de la máxima autoridad pública vasca".
   Por ello, exigió una "aclaración de lo ocurrido" con el fin de que se puedan "depurar todas las responsabilidades" en torno a esta cuestión.
   La comisión de control de los créditos destinados a gastos reservados del Congreso, en la que comparecerá Sanz Roldán, se celebrará, finalmente, el 15 de marzo, a las 13.00 horas.

La Casa Blanca cierra su embajada en LIbia; Francia considera legítimo al gobierno rebelde




l presidente francés, Nicolás Sarkozy, ha decidido pasar a la acción ya en torno a la crisis libia. Según medios galos, aún no confirmados por El Elíseo, el mandatario propondrá a sus socios europeos ataques a objetivos específicos del régimen libio para proteger a la población civil, tras haber recibido ayer a miembros del Consejo Nacional Libio de Transición (CNLT).

Así lo relato el filósofo francés Bernard-Henri Lévy al término de la reunión con los opositores libios a la que asistió.

El escritor, próximo al presidente francés y consejero en algunos temas, indicó que Sarkozy se comprometió a llevar esa propuesta al Consejo Europeo que tendrá lugar hoy en Bruselas con Libia como tema central del orden del día.

En concreto, Sarkozy propondrá atacar el aeropuerto militar de Syrte, a 500 kilómetros al este de Trípoli, el de Sebha, cerca de la frontera con Chad, y el centro de mando de Muamar Gadafi en Trípoli.

Ruptura de relaciones. Sarkozy anunció asimismo que Francia es el primer país que reconoce a los rebeldes del CNLT como los “representantes legítimos” de su país. La medida se verá concretada en los próximos días con el envío de un embajador a Bengasi, la capital rebelde.

El anuncio provocó una inmediata respuesta del gobierno de Gadafi, que amenazó con romper relaciones diplomáticas con Francia.

Apoyo de Cameron. Sarkozy recibió el apoyo del primer ministro británico, David Cameron. En una carta dirigida a Herman Van Rompuy, presidente del Consejo Europeo, ambos piden a la UE que reconozca al gobierno rebelde como “un interlocutor válido”.

Además, los dos mandatarios europeos pidieron públicamente a “Gadafi y su camarilla” que abandonen el país.

“Condenamos el uso de la fuerza contra civiles por el régimen de Gadafi y hacemos un llamado a su final inmediato”, agregan en la misiva.

Embajada suspendida. EU quiso también enviar un claro mensaje a Gadafi de que ya no le considera el líder legítimo de Libia, al suspender las relaciones con su embajada en Washington y al encargar a la secretaria de Estado reunirse con la oposición libia.

“Estamos suspendiendo nuestras relaciones con la embajada libia actual, de manera que esperamos de ellos que terminen sus operaciones” en la legación, dijo.

Eso significa que Libia debe cerrar su embajada, pero no supone una suspensión de las relaciones diplomáticas.

“No aceptaremos a enviados del régimen de Gadafi representándole en Washington”, explicó después en el Departamento de Estado.

En cuanto a la marcha de la guerra, James Clapper, director de la Agencia Nacional de Inteligencia de EU, dijo que el coronel libio puede terminar “imponiéndose en el largo plazo” dentro de un conflicto armado similar “al de Somalia”.


Tropas gadafistas toman Ras Lanuf;

los rebeldes huyen hacia el este


Las fuerzas gadafistas han tomado el enclave petrolero de Ras Lanuf, a unos 450 kilómetros al este de Bengasi, y los milicianos se repliegan hacia Brega, según un comandante revolucionario citado por Al Yazira.

El corresponsal de Al Yazira, que acompaña a las fuerzas rebeldes en su retirada, dijo que el número de fallecidos era muy elevado, según el mismo comandante, que dio por muertos a todos sus hombres.

Los intensos bombardeos aéreos, acompañados de cohetes, morteros, carros de combate y artillería además del despliegue de tropas terrestres, han acabado con la resistencia rebelde.

Hay “docenas de muertos y muchos heridos” señaló ese comandante que admitió la huida de sus milicianos.

El ataque fue lanzado desde el sur y el oeste de Ras Lanuf, agregó la cadena catarí, con una ofensiva “muy brutal y muy profesional” por parte de las tropas leales a Gadafi.

Los milicianos no pudieron hace frente a la superioridad en armamento de los gadafistas y admitieron que no contaban con las armas necesarias para poder resistir ante el fuerte empuje de las fuerzas gadafistas que han contado con artillería pesada y morteros.

jueves, 10 de marzo de 2011

Inteligencia de EEUU: programa nuclear iraní es pacífico






El informe anual del servicio de Inteligencia estadounidense confirmó la naturaleza pacífica del programa nuclear iraní. 

Un reciente informe anual de los servicios de inteligencia estadounidense modificó las valoraciones anteriores sobre la posibilidad de que Irán fabrique armas nucleares y asintió la naturaleza pacífica del programa atómica del país persa, informa Press TV, citando el informe publicado por "The Washington Post". 

En el documento entregado al Congreso estadounidense, no se han mencionado las acusaciones de que Irán mantiene la opción de fabricar armas nucleares, anuncia Press TV. 

El Centro de Control de Armas, Inteligencia y No-Proliferación de Armas de la CIA, realizó este informe con la colaboración del Consejo Nacional de Inteligencia estadounidense. 

Un informe de los servicios de inteligencia de Estados Unidos publicado en 2007 asegura que Irán había detenido en 2003 sus planes para presuntamente dotarse de armas nucleares. 

El Director General de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Yukiya Amano, reconoció a su vez, el pasado lunes que desde que asumió su cargo en diciembre de 2009, no había ninguna señal de que Irán desarrolle un programa nuclear militar. 

Irán como miembro de la AIEA y del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP) desarrolla su programa nuclear con fines plenamente pacíficos y bajo la supervisión continua de los inspectores internacionales. 

Un teórico de pacotilla sobre fondo de las extravagancias de la familia



Mediocre estratega, mediocre táctico y altamente nocivo, el Coronel acabó perdiendo entonces definitivamente la simpatía de sus aliados naturales. Sólo debe su supervivencia a la protección de la Unión Soviética, que pensaba compensar con Libia la deserción del Egipto post-Nasser, a la vigilancia de los servicios de inteligencia de Alemania del Este que desbarataron numerosos intentos de golpes de Estado fomentados contra él y a los aviadores norcoreanos y sirios que aseguraron permanentemente la protección de su espacio aéreo.
La guerra verbal es la única guerra que llevó a cabo. El Coronel, en efecto, desarrolló una fraseología escandalosamente polémica con el deseo de acreditar la idea de que estaba a la vanguardia de la lucha contra «el imperialismo estadounidense» y así conseguir que se olvidaran sus anteriores conexiones anglosajonas. Gadafi utiliza, así como sus medios de comunicación, una terminología hasta tal punto histriónica que la población a veces apenas puede descifrarla.
Una cumbre Regan-Thatcher del presidente estadounidense Ronald Reagan y la primera ministra británica Margaret Thatcher, en el poder en los años 80, se calificó como un encuentro entre «el perro rabioso de Israel y la asesina de niños», en alusión al ataque estadounidense a Trípoli en abril de 1986 durante el cual murió la hija adoptiva del Coronel. El Cairo, que en árabe significa «la victoriosa» se designó, por inversión, como «la vencida», y el movimiento chií Amal, que en árabe significa «la esperanza» se nombró como «la desesperación». La «Casa Blanca» se convirtió en la «Casa Negra», el Reino Unido en «el portaaviones inamovible de los estadounidenses», aludiendo a la autorización concedida a los aparatos estadounidenses para despegar de las bases británicas durante el ataque a Libia. El presidente Egipcio Hosni Mubarak era, por un juego de palabras, «el arrollado» (Al-Barek), el rey Hussein de Jordania «el traidor» y el presidente de Chad Hissene Habre, en conflicto con Libia, «el corrupto».
En un alarde de cultura, el «Guía supremo de la revolución libia» editó su Libro Verde, un resumen de teorías contradictorias recabadas de las ideas en boga, que se presentaba como una especie de «Tercera teoría universal». Ofrecida graciosamente a todas las personas que pasaban por Libia o se relacionaban con ese país, una formalidad obligatoria, la obra se proponía instaurar un socialismo sin socialistas, una democracia sin demócratas y un poder popular sin pueblo. La «populocracia» «Jamahiriya» que Gadafi llevó a cabo elevó la burocracia a sistema de gobierno y el parasitismo a norma de vida.
Un bloqueo draconiano de diez años (1992-2002) probaría su resistencia. Gadafi entregó a la justicia internacional a su colaborador más cercano como chivo expiatorio del atentado de Lockerbie antes de pasar él mismo por el aro estadounidense, encantado de librarse de la funesta suerte del iraquí Sadam Hussein.
En 1995, obsesionado por una idea que consideraba «genial», envió a un grupo de libios en peregrinación a la Mezquita Al-Aqsa en Jerusalén, el tercer lugar santo del Islam, imaginando que con ese golpe de efecto rompería el bloqueo que castigaba a Libia desde hacía tres años. Pero esa rocambolesca peregrinación al final desembocó en un aval a la soberanía israelí sobre la Ciudad Santa y en un reforzamiento del Estado hebreo en su papel de guardián de los Lugares Santos.
En diciembre de 2003, en una operación que apareció como una rendición sin condiciones, Gadafi se abandonó a los estadounidenses y entregó sin ninguna resistencia todo su programa nuclear al gobierno neoconservador del presidente George Bush hijo al tiempo que desveló todo un sector de la cooperación de los países árabes y musulmanes (Pakistán, Irán Siria) en el ámbito de la tecnología nuclear.
Sadat en su escapada solitaria tuvo la excusa de la paz. Gadafi su propia supervivencia. Dos años después de rendirse sin condiciones al orden estadounidense el Coronel Gadafi, fiel a sí mismo, en la cumbre árabe de Argel, el 22 de marzo de 2005, trató a palestinos e israelíes de «idiotas» por no haber construido una federación «Isratina», neologismo formado por la contracción de Israel y Palestina, borrando de un trazo cincuenta años de lucha del pueblo palestino para evitar la negación de su identidad nacional.
En lo más álgido de la exasperación nacionalista en Irak y en Palestina, mientras el primer ministro israelí Ariel Sharon se entregaba con total impunidad a los asesinatos extrajudiciales, los asesinatos dirigidos por helicópteros, de los dirigentes islamistas jeque Ahmad Yacine y Abdel Aziz al-Rantissi, mientras el jefe de la Autoridad Palestina elegido democráticamente, Yasser Arafat, estaba confinado en encierro domiciliario desde hacía tres años en Ramala y la opinión mundial estaba bajo el choque de las revelaciones de las torturas de la prisión iraquí de Abu Ghraib, el libio, tragándose la vergüenza, justificó su rendición en términos que sonaron como una deserción. «Estados Unidos nunca ha sido enemigo de Libia, sancionada por su solidaridad con Yaser Arafat y las causas del Tercer Mundo (…) Arafat se enredó con los estadounidenses y su primer ministro se saluda con su homólogo israelí (…) Los libios deben alinearse al lado de Estados Unidos», afirmó contra toda evidencia en Syrte ante una asamblea impasible molesta por tantas deserciones.
Las extravagancias de los descendientes

¿Amaneramiento experimentado? ¿Afirmación del narcisismo? Este revolucionario ha vivido en la opulencia a bordo de automóviles rutilantes, con amazonas de leyenda, una retahíla de hermosas jóvenes como guardaespaldas, un sastre italiano de alta costura dedicado a su augusta persona; y sus hijos Seif El Islam y sobre todo el pequeño, Aníbal, en un lujo escandaloso, saltando con regularidad a la crónica mundana de las capitales occidentales.

La descendencia de Gadafi, siete miembros con personalidades singularmente contrastadas, presenta una particularidad propia de la familia: tres de los hijos del Coronel, entre ellos el deportista Saadi Moutassem Billah (alias Aníbal) y Khamis, sirven en el ejército libio con el grado de coronel, el grado de su papá; un grado infranqueable por un curioso fenómeno de atavismo.

Un cable de WikiLeaks de 2006 ya reveló que todos los hijos de Gadafi y sus próximos pillaban grandes rentas de la Compañía Nacional del Petróleo y de las demás filiales petroleras, especialmente el sector del gas y las actividades relacionadas, el de las infraestructuras, el hotelero, los medios de comunicación y la distribución.

1. El primogénito, Mohamed (39 años): Hijo del primer matrimonio del Coronel, es el artífice de la implantación de «Alcatel» en Libia por medio de la sociedad privada que preside, laLibyana Mobile Phone, gracias a una transacción que le permitió embolsarse 330 millones de dólares. Este discreto ingeniero preside la «Asociación Mediterránea de Ajedrez».

2. Seif Al-Islam (nacido en 1972): «El sable del Islam», es el primer hijo del Coronel Gadafi con su segunda esposa, Safia Farkash, una mujer croata. Primogénito de los otros seis hijos del Coronel se considera heredero del trono de esta república dinástica. Arquitecto, pintor y playboy diletante a ratos perdidos, es el parangón de la modernización de Libia. El «Sable» ha desempeñado un papel clave en la regulación de todos los contenciosos, en especial en los que derivaron de los atentados terroristas financiados por Trípoli desde la década de los 80. En Francia es conocido sobre todo por su papel en la liberación de las enfermeras búlgaras en 2007 y por las indemnizaciones a las familias de las víctimas del atentado de Lockerbie y el del DC-10 de la compañía francesa UTA, derribado cuando sobrevolaba el desierto de Ténéré en 1988. Dos atentados que constituían el principal obstáculo para la normalización de las relaciones entre Libia, Estados Unidos y Europa.

En la presidencia de la «Fundación Gadafi», organización caritativa no gubernamental, Seif despliega sus cualidades de negociador al servicio de una auténtica diplomacia paralela, puncionando el dinero de los hidrocarburos para engatusar a los occidentales a golpe de contratos de armamento (1). Su política de apertura ha permitido que regresen a Libia grandes compañías petroleras como la estadounidense Exxon Mobil, BP y ENI. A lo largo de esos múltiples «buenos oficios», el presunto heredero ha conseguido que se olvide la imagen del playboy que viajaba acompañado por sus dos panteras cuando estudiaba en Viena. Después de estudiar Arquitectura en Trípoli y de que le prohibieran entrar en París en los años 90, continuó sus estudios en la International Business School de Viena (Austria) donde se relacionó amistosamente con el líder populista de la ultraderecha Jörg Haider.

Debido a la necesidad de que Libia se integrase en la globalización, los periódicos occidentales adosados a los conglomerados del armamento y las obras públicas limaron la parte contundente y escandalosa de su nombre para designarlo, más escuetamente con el de Seif, amputando la parte sustancial de su nombre, la que constituía con respecto a su padre la fase conquistadora y revolucionaria de su programa a la que dicho nombre aludía. El heredero que se preparaba para la sucesión parece que pagó a la cantante Mariah Carey la suma de un millón de dólares (728.000 euros) para que fuese a cantarle cuatro de sus éxitos a la isla de San Bartolomé, en el mar Caribe. Deseoso, sin embargo, de obtener un barniz de respetabilidad, este propietario de una suntuosa casa en Londres consiguió un diploma en la prestigiosa London School of Economics (LSE) basándose en una tesis presentada en 2008 sobre el tema «El papel de la sociedad civil en el proceso de democratización», una distinción universitaria acompañada de una donación de 1,5 millones de libras esterlinas de su fundación a la institución londinense para crear un Centro de Estudios para la Democracia. Al juzgar que la represión practicada en Libia en febrero de 2011 no correspondía a las enseñanzas que le inculcó la LSE, ésta reconsideró el conjunto de sus relaciones con Libia y renunció a las subvenciones (2).

3. Saadi (37 años): El futbolista fantasioso, presidente del comité olímpico de su país, llegó a la fama internacional por haber provocado un tiroteo mortal en un estado de fútbol en Trípoli. Miembro del equipo de Perugia (Italia), su carrera internacional como jugador ha sido una de las más cortas de la historia mundial del fútbol. Nunca fue seleccionado por el club, a pesar del patrocinio de su padre, y en 2003 fue condenado por dopaje. Accionista del club italiano de fútbol «la Juventus», en la actualidad dirige una unidad de élite del ejército desde la que trabajaba presionando en los asuntos comerciales antes de que lo enviasen a Bengasi al principio de los motines para sofocar la rebelión. En vano. Saadi pasará a la posteridad como «goleador del milenio» gracias a un partido patrocinado el 31 de diciembre de 2000 a las 23:00 h. para permitirle marcar un gol con ocasión del paso al nuevo milenio. Su compañera en la vida no es otra que Vanessa Hessler, modelo italiana de la agencia Alice que hace la publicidad de la firma ADSL.

4. Khamis, formado en Rusia, dirige una brigada especial encargada de la seguridad de su padre, es el punto de equilibrio e interposición de la competición entre clanes, entre Seif Al Islam Gadafi (el reformador) y Mutassam Billah, Consejero de la Seguridad Nacional, enfrentados en una gran rivalidad por el poder en la sucesión del padre. Khamis, el hombre de las misiones difíciles, sería el encargado de conseguir la neutralidad de los países occidentales en la guerra civil larvada que estraga Libia desde el 17 de febrero.

5. Mutassam Billah (34 años) , literalmente «abrazado a Dios». El que escogió como seudónimo Aníbal lleva un nombre prestigioso asociado a la epopeya de Cartago. Médico y militar de formación, este coronel del ejército libio presidió hasta 2007 el Consejo Nacional de Seguridad, antes de que lo retirasen tras las reestructuraciones familiares. Después se le reintegró como Consejero. Partidario de una política dura se considera que controla, por cuenta de su padre, las redes de influencia y los grupos de presión en Libia. Fue el artífice del último apaciguamiento entre Libia y el Egipto de Hosni Mubarak.

Antepenúltimo de los cinco descendientes varones de la familia Gadafi, se caracteriza por su comportamiento abusivo y sus excesos verbales, y aparece como la burda imitación de un títere de una opereta repetitiva. Aventurero y asiduo de los medios informativos de variedades, en 2004, tras una noche de escándalos y locuras, confundió la avenida de los Campos Elíseos con un circuito automovilístico de Fórmula 1 y se lanzó en tromba a 140 kilómetros por hora. Reincidente en 2005, atropelló a su compañera libanesa de entonces, que estaba embarazada. En 2006, su nombre apareció en una red de prostitución de lujo que operaba en Cannes (sur de Francia).

En 2008, encargado de la intendencia, tuvo la ingeniosa idea de pedir a Suiza relojes Chopard para agasajar a los huéspedes vip invitados a la conmemoración del régimen. En uno de sus habituales ataques de furia golpeó a dos empleados de su hotel suscitando una interpelación de la policía suiza y la subsiguiente crisis diplomática entre Suiza y Libia. Un año y medio después de su detención en Ginebra, el hijo pródigo del Coronel Gadafi hizo otra vez de las suyas. De vacaciones en Londres por Navidad, Aníbal provocó la intervención de la policía por golpear a su esposa.

Despilfarrador y juerguista, escandalizó en la isla de San Bartolomé, en 2009, durante una noche de fiesta en presencia de Jay-z y Beyoncé. También se cree que exigió a su progenitor la astronómica suma de 1.800 millones de dólares (1.300 millones de euros) para constituir «su propia milicia» como la que disfrutaban sus hermanos. Su propio hermano Khamis habría escuchado su petición y se encargó de satisfacer el capricho dándole la posibilidad de «dirigir un grupo de fuerzas especiales que serviría de unidad protectora del régimen». Aníbal también entretuvo a los veraneantes europeos dos veranos, en 2008 y 2009, llegando incluso a provocar una crisis diplomática entre Suiza y Libia mientras a finales de agosto su padre recibía una citación para comparecer ante la justicia libanesa por su complicidad en la desaparición del líder espiritual chií libanés, el imán Moussa Sadr.

Basando su poder en la transgresión, el alcohol, el sexo y la violencia, aprovechando el encanto de un físico agraciado, Aníbal es víctima de la contradicción de su padre, quien proclama sin cesar su voluntad de revolucionar las costumbres árabes y al mismo tiempo es incapaz de dar una verdadera educación a sus hijos, de lo que Aníbal es la mejor demostración, al contrario que Seif al-Islam, que se abstiene de extravagancias a luz del día. Después de cada una de sus tropelías, Aníbal se refugia en la inmunidad diplomática que le confiere su estatus de «hijo de papá» para dotarse de impunidad, usando y abusando de su posición en una patética y caricaturesca deriva del poder libio, que se reivindica como una «populocracia» (gobierno de las masas) pero que se muestra como una de las mayores supercherías políticas de la historia árabe contemporánea.

6. Seif Al-Arab, licenciado por la Universidad de Munich y amante de la velocidad, tuvo problemas con la policía alemana que le confiscó su Ferrari por exceso de velocidad y conducción peligrosa.

7. Aicha. Única hija de Gadafi, es la presidenta de la fundación caritativa «Waatassimu», en alusión a las primera palabras de un versículo del Corán que estipula «Abraza la fe en Dios y no te distraigas». Su actividad altruista camufla mal las numerosas adquisiciones concedidas por su padre en «los sectores de la energía y de la construcción, así como los intereses financieros en la clínica privada de Saint James en Trípoli».

Flamante abogada, participó en el comité de apoyo de la defensa del ex presidente iraquí Sadam Husein. Licenciada por la Universidad París VII (René Descartes) y autora de una tesis sobre el Tercer Mundo dirigida por el profesor Edmond Jouve, la benjamina de la familia ambicionaba un papel de primera fila en su país jugando la carta del feminismo y la modernidad. Ataviada con pantalones vaqueros y gafas negras, esta rubia teñida es presentada por la prensa internacional según los rumores de sus actividades, a veces como la «Claudia Schiffer de Libia» y otras veces como «Loana», una famosa participante de un «reality» de la televisión francesa, sin que se pueda concluir si sus extravagancias constituyen una ventaja o un hándicap en una sociedad mayoritariamente de extracción beduina.

La última y octava hija de la familia Gadafi era Hana (dulce serenidad), hija adoptiva del Coronel que murió en el ataque estadounidense contra Trípoli en 1986.